viernes, 22 de abril de 2011

Colaborac(c)ión//Colabor(accidia)


Estrenamos en dos semanas y es hora de pediros colabora(c)ción. Sabemos que ahora no tiene sentido hacer espectáculos en teatros convencionales y que eso está muy pasado, pero también sabemos que nos encanta hacerlos y que queremos encontrar la manera de compensar nuestro convencionalismo. Por eso queremos pediros un par de cosas que eviten que nuestra pieza deje de ser nuestra y sea nuestra y vuestra.

Para empezar, nos gustaría que grabarais un video de vuestra habitación, o de alguna habitación, y nos lo mandéis. Tiene que poder ser mostrada en escena. Idealmente, la grabación sería de una pared de esa habitación, sin esquinas, y en un formato de 16/9. Esa habitación puede ser proyectada en nuestra escenografía durante unos instantes, y nos permitirá que algo tuyo, algo que recuerdas, aparezca con nosotros.

También nos gustaría que nos tararearas alguna canción que te guste mucho o que te haya gustado mucho en el pasado. La puedes grabar y mandárnosla también para un momento del espectáculo. No hace falta que la grabes con una calidad brutal, buscamos el tarareo y la inmediatez.

También queremos invitarte a una fiest/accidia que ocurrirá después del estreno, a eso de las 23 horas, en nuestro local de la calle Leonor Jovani 12, en Benimaclet. No es una fiesta post estreno sino parte de la pieza, y estaremos encantados de que vengas y continúes disfrutando del micromundo que hemos montado.

Anímate. Va.

Envíos a lacojadanza@lacojadanza.com

lunes, 11 de abril de 2011

Pandillaccidia.

Casi podríamos sacar de la chistera el orden de las escenas, porque cualquier cambio se puede asumir y lo importante es vivirlo con alegría. Si somos capaces de rebobinar un terremoto, retroceder 20 años con un solo giro de 180º, relinchar y gruñir y correr y saltar... ¿cómo nos va a importar ir al cine antes o después de sacarnos el corazón del pecho con nuestras propias manos?


Y no todo es bailar. A nuestro alrededor empiezan a agruparse personalidades relevantes que impiden que nos dediquemos en exclusiva a sudar y a pensar que un espectáculo se reduce a sus intérpretes. Cada uno nos deja un regalo precioso que consiste en su presencia, su especialidad y su aprobación. Su implicación en un proyecto que les incluye y que se toman como tal. Max, Biel, Óscar, Raquel y Lucía vienen a los ensayos porque les toca o porque quieren, con resaca o sin ella. Emplean la total duración de los días que se suponen de descanso para remangarse y grabar, programar, iluminar, decorar, pintar, cortar, proyectar, observar, etc. Nos gusta la pandilla.


Ya queda menos de un mes, un periodo que ya empieza a agruparse en nuestra garganta. Se nota al tragar. Menos de un mes para llegar con nuestros cables, nuestros trastos y nuestros cuerpos al Rialto. Un mes en el que nos veremos poco. Es lo que tiene el pluriempleo. Un mes más que suficiente para dudar de todo y querer escaparse al monte. Para reafirmarse en todo y querer volver del monte. Un mes para volver a bailar algo aun desconocido. Para presentarnos a nuestra pieza y ver cómo nos cae.

viernes, 1 de abril de 2011

Recuerdo-Sombra.


                                                        dibujo de Óscar Martín

¿Qué mutación permite que un recuerdo sobreviva y otro se desvanezca? ¿Por qué recordamos cosas y olvidamos otras? ¿Es común que tengamos recuerdos vívidos de acontecimientos insustanciales y no recordemos momentos memorables?

¿Qué se hace con los recuerdos que se pierden? ¿Se reciclan? ¿Vuelven sus materiales a una central en la que se utilizan para la generación de recuerdos nuevos? ¿Qué le pasa a un recuerdo justo antes de desvanecerse? ¿Se rebela ante su desaparición? ¿Se esconde para evitar su disolución y puede por ello aparecer de nuevo, sin avisar, provocando una revolución en su nación? ¿O acepta su muerte con naturalidad?

¿Hay un espacio en el que se agrupan los recuerdos que están destinados a ser olvidados? ¿Hacen cola ante el lugar donde son despedazados? ¿O simplemente se ensombrecen hasta que, sin luz, dejan de poder ser evocados por la memoria? ¿Hay algo parecido a un recuerdo-sombra?